L

o que nunca pudo imaginar Gore Zhdanov, de 79 años, era que tras su muerte su fiel amigo Coco iba a ser el protagonista de su herencia. Gore falleció hace un año en su casa de Novosibirsk (Rusia). Con él convivía un perro de la raza Bobtail o Antiguo pastor inglés llamado Coco.

Al parecer, un problema en la herencia hizo que los nuevos propietarios dejaran al perro metido en la casa para que cuidara de los objetos de valor. Pero esta situación se alargó en el tiempo y casi un año después, cuando se solucionó el problema de la venta y los equipos de rescate fueron enviados, se encontraron a Coco en un lamentable estado.

Durante todo ese tiempo sólo se habían limitado a mal atender al can olvidándose de bañarlo o cortarle su larga melena. Cuando fue rescatado una masa de pelo con incrustaciones de heces y empapado en orina recubría su cuerpo.

Era tan pesada que le impedía moverse ni respirar. El equipo de rescate no tuvo palabras para definir la desastrosa apariencia de Coco. “Apenas podía caminar y estaba en un estado lamentable. Los familiares nos llamaron para que nos lo lleváramos porque querían vender el piso y completar los trámites de la herencia”, relata uno de los integrantes del equipo de rescate.

Actualmente Coco vive con Elena Rivvo que se está ocupando de que se restablezca completamente. Necesita, según los veterinarios, una buena dieta alimenticia y vitaminas para que pueda recuperar su peso.

Fuente: Georgia Newsday

Pin It on Pinterest

Share This