Se puede negar la presencia de tu perro guia porque sea de la raza pitbull?
P
ues parece que en el colegio americano donde asiste Anthony, un niño paralítico cerebral con paralisis espastica, trastorno convulsivo y falta de habla, no permitían su entrada.
Esta historia comienza cuando Mónica, la madre de Anthony Merchante, requirió a la Junta Escolar del Condado , durante dos años, la necesidad de que su hijo fuera acompañado por «Stevie» al colegio.
Esto no era un mero capricho pues «Stevie», un perro de raza pitbull, estaba entrenado bajo las Normas Internacionales de Asistencia especificas para perros. O sea, para cuidar y asistir a Anthony.
La negativa inicial del colegio se convirtió en un sí, siempre que se cumplieran varios requisitos entre los que se encontraban vacunas extras no necesarias, un seguro de responsabilidad civil y además, que la madre pagara una persona que vigilara al perro, dada la supuesta «peligrosidad» de la raza, mientras este estuviera en el centro. Una locura.
Stevie está entrenado para avisar cuando a Anthony le sobreviene una crisis respiratoria y sabe subirse a su silla para detenerle la cabeza. De esta manera evita que la crisis desemboque en una obstrucción respiratoria. Además, este pitbull lleva el chaleco sanitario con la medicación especifica que necesita el niño.
Las negativas escolares llevaron a la madre de Anthony a presentar una demanda ante el Departamento de Justicia. La sentencia obliga al cumplimiento de una legislación histórica aprobada en el Congreso en 1990 y que estipula que: “Las entidades públicas deben permitir que las personas con discapacidad puedan ser acompañadas por sus animales de servicio”, y argumenta que la junta escolar “fundamentalmente no entiende” las normas de ADA.
“Stevie me permite saber cuando Anthony tiene una convulsión, o problemas respiratorios. Empieza a ladrar, va a buscarnos y me empuja hacia él. Luego regresa y no se separa de mi hijo” explica Mónica.
Las instituciones deben entender que los animales de asistencia deben permanecer el mayor tiempo posible con las personas a las que cuidan. De esta manera, según explican los expertos, el vínculo se hace más grande y la capacidad de respuesta y eficacia del animal son mejores.
Fuente: Guaupost.com