U
n ejemplo más de la convivencia entre perros y gatos, se ha dado en Utah (USA) cuando una señora se encontró varios cachorros de Chihuahua a la puerta de su casa. Envueltos en una caja de cartón, sólo iban acompañados de una nota informativa que decía «su madre ha muerto». Finalmente la sorprendida vecina decidió acogerlos, y ponerse en contacto con la «Humane Society of Utah» que daba la casualidad de que en eses momentos, tenía una gata que estaba en período de amamantamiento de sus cachorros. Cual no sería su sorpresa al advertir horas después, que esa gata no sólo se había hecho cargo de los cachorros, sino que también estaba amamantándolos y cuidándolos.
Fuente: Telemundo Utah