“Existía en ese entonces un puente entre Asia y Alaska, que apareció cuando los glaciales del último período glaciar estaba en su máximo, aprisionando millones de kilómetros de precipitación que normalmente habrían ido a los océanos. La falta de esa agua redujo el nivel del mar de Bering más de 90 metros, bastantes para convertir los bajos del estrecho en un puente de tierra que unía los dos continentes.”
Jaime Bel Ventura
H
ola, mi nombre es Garfield, aunque a estas alturas, estoy seguro que todos me conocéis. Hoy vengo a hablaros de un perro muy especial cuyo origen es ancestral y al que los Incas llamaron allqu, que significa “perro”. Actualmente, en algunas zonas del Perú se le conoce como “perro chino”, y en la parte norteña del país entre Piura y Trujillo lo llaman Viringo (palabra quechua que significa “avisador”); nombre que utilizaron los Moches o Mochicas, ancestros de los actuales pobladores.
Pero antes de hablaros de él, tenemos que ahondar en sus orígenes y para eso debemos de irnos hasta la última glaciación, la llamada “Glaciación de Würm o Wisconsin” hace 40.000 años.
Los investigadores actuales sostienen varias teorías sobre la aparición del hombre en el continente americano, siendo la más aceptada las migraciones de antiguos asiáticos a través del estrecho de Bering, en este período histórico; en el cual, dicho paso geológico quedó operativo para su recorrido a pie, en una franja de 25 kilómetros de ancho.
Actualmente, con los avances en el campo de la genética, se ha podido demostrar que los paleoindios de América del Norte y América del Sur mostraban diferencias considerables en sus genes y fenotipos, lo que ha dado origen a otra teoría que apunta que la migración Sudamericana llegó a través del contienente Antártico desde la antigua Australia, dado que sus rasgos son australoides, frente a los mongoloides de los paleoindios del norte del continente.
El antropólogo Mc. Neish sostiene que los paleoindios primitivos llegaron a los Andes peruanos hace 17.000 años. Fecha en la que fueron datados raspadores, cuchillos primitivos y puntas de proyectil, encontradas en el yacimiento de Paccaicasa (Ayacucho).
Todo este rollo que os he contado, viene a cuento porque el ancestro del perro de nuestra historia, según las teorías, acompañó a esos primitivos paleoindios en su colonización del continente americano.
La investigadora María Reiche deja entrever, en su libro “Contribuciones a la Geometría y Astronomía en el Antiguo Perú”, la posibilidad de que esta raza de perro esté representado en una de las milenarias líneas de Nazca, aunque las primeras noticias oficiales de su existencia se remontan aproximadamente al año 500 a.C., en culturas preincas como la Chavín (800 a.C.), Moche (600 d.C.), Wari (700 d.C.), Vicús (300 d.C.), Chimú (1100 d.C.), Chancay (1100 d.C.), donde apareció representado en vasijas, instrumentos musicales, brazaletes o cinturones.
Los Incas lo tenían en muy alta estima, pues pensaban que los perros negros de esta raza eran los guías de las almas en su viaje al más allá; motivo por el cual, participaban en ceremonias rituales dedicadas a la divinidad lunar (Mama Killa).
Tras el exterminio que sufrieron los Incas por parte de los conquistadores españoles, en 1532, encabezados por Francisco Pizarro, fueron los campesinos los que consiguieron mantener viva esta raza hasta nuestros días, basando su conservación en antiguas creencias curativas de esta razas de perros por su alta temperatura corporal, los cuales eran utilizados como calefactores para aliviar dolencias reumáticas o artríticas
La Federación Cinológica Internacional (FCI), reconoce y registra en 1985 a esta raza de perros, clasificándolos como primitivos. Calificación que sólo se le otorga a las razas puras con características morfológicas que hayan permanecido intactas durante miles de años. Más tarde, en Octubre de 2001, el Congreso de la República del Perú los nombró patrimonio de la nación peruana y los reconoció como oriundos del país.
CARACTERISTICAS
Esta raza de perro carece de pelo. Según el doctor Pedro Weiss, de la Universidad Cayetano Heredia, y estudioso de esta raza, afirma que no son una raza zoológica, sino una variedad teratológica o mutante, y su falta de pelo se debe a una característica genética denominada Hipoplasia Ectodérmica. Esta característica hace que su temperatura corporal sea superior a la de otros perros, alcanzando de media los 40 grados.
Es una raza de perros perfecta para los alérgicos. Es muy cuidadoso con los niños, fiel guardián, obediente e inteligente y, por si fuera poco, en esta raza no anidan las pulgas.
MORFOLOGIA
Estos perros se dividen en tres tallas:
Pequeño: 25 a 40 cm 4 a 8 kg Mediano: 40 a 50 cm 8 a 12 kg Grande: 50 a 65 cm 12 a 25 kg
El color de su piel varia desde el negro pizarra, negro elefante, negro azulado, toda la gama de grises y marrones. Algunos ejemplares tienen manchas rosadas lo que hace que esta variedad reciban la denominación de orquidea. Siendo los negros y marrones mas oscuros los que tiene la raza más pura.
Su nariz es puntiaguda. Sus orejas largas y de forma triangular, con la base ancha, se ponen erectas cuando están prestando atención y permanecen pegadas en reposo. Su cola es fina y larga. Algunos ejemplares presentan vestigios de pelo en la cabeza, extremidades y cola.
Son perros esbeltos con una buena musculatura que hace que alcancen velocidades de 60 km/h y pueden saltar dos metros de alto.
ENFERMEDADES
Los Viringos no presentan muchas complicaciones médicas. Si es cierto que las altas temperaturas corporales de esta raza de perros provocan la ausencia de los dientes premolares, así como una alta fragilidad en sus uñas. Su punto débil es la piel por estar totalmente expuesta.
Puede sufrir comedones por acumulación de keratina en los folículos pilosos. La dermatitis actínica o dermatitis solar por fotosensibilidad es frecuente, llegando incluso a producir carcinomas en las pieles más claras de esta raza.
Como habéis leído, es una raza muy curiosa de perros. No se habla mucho de ella a pesar de la peculiaridad de su morfología y antigüedad, por eso quise compartirlo con vosotros. Tal vez, más adelante hablemos de sus parientes los gatos sin pelo, con los que comparten historia.